
Había una vez una calabaza que se llamaba Calabás que estaba dando un paseo.

Al cabo de un rato se encontró con su amiga Calabacis y jugaron.

Se lo estaban pasando tan bien que no se dieron cuenta de que se había hecho de noche. De pronto aparecieron unos fantasmas y se asustaron mucho.

Al día siguiente se habían convertido en monstruos.
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...